Archivo de Greg Kinnear

VERANO EN BROOKLYN (Little men)

Posted in Críticas (Estrenos) with tags , , , , , , , , on octubre 19, 2016 by Gonzalo Contreras

LOS PRIMEROS AMIGOS

Verano en Brooklyn

La historia de camaradería de dos chavales inseparables, unidos por la mano del destino y separados por la de sus respectivos padres, sirve al director Ira Sachs para trazar en VERANO EN BROOKLYN (variopinta traducción del original y revelador Little men) una sentida, agridulce y conmovedora fotografía de la adolescencia. Sin artificios, sin escenas directas al lagrimal; tan solo capturando la cotidianidad más reconocible y transparente. Como ejemplo, la aguda descripción de los jóvenes protagonistas y sus personalidades bien diferenciadas: uno, centro de atención del grupo; el otro, novato en temas de amistad. Las miradas de complicidad entre ambos, la naturalidad que desprenden compartiendo confidencias en el metro, recorriendo las calles del distrito a golpe de patinete (maravillosas transiciones temporales) o disfrutando de pequeños momentos de devaneo con sus compañeros de juerga, instantes rodados con una lucidez próxima al Truffaut que capturaba la sonrisa de sus diminutas estrellas sin que ellas lo intuyeran, dota a la cinta de una sinceridad aplastante, de esa llama que convierte a los buenos relatos en narraciones con alma, con corazón.

veranoLa fuerza de la película no sería la misma sin el papel taxativo de los adultos, encabezados por el siempre magnífico Greg Kinnear. Sachs, huyendo de cualquier tipo de lección moralizadora y juicios de valor, deja que sean ellos los que marquen los compases de la amistad de sus vástagos, siendo sus ambiciones y decisiones (ya estén basadas en la clemencia o en el orgullo que proporcionan las titulaciones universitarias) determinantes en el devenir de la relación. Cuando el conflicto de intereses explota, ambas partes, de alguna manera, tienen razón. Y todos se equivocan, y aprenden de sus errores. O quizás no. Pura contradicción humana, consumada con una brillante reflexión final acorde con la naturaleza reflexiva del film: el tiempo es el único que pone orden al desorden. Y todo vuelve a fluir. Como la vida misma.

EL CIELO ES REAL

Posted in Críticas (Estrenos) with tags , , , , , , on junio 18, 2014 by Gonzalo Contreras

EL CIELO PUEDE ESPERAR

cielo 2

Dejando a un lado la creencia o no de la historia contada y, por supuesto, las críticas fáciles que posiblemente recogerán no pocos medios, hay que reconocer que la nueva cinta del guionista de la maravillosa Braveheart, EL CIELO ES REAL, parte de una idea tremendamente atractiva.

Tras un sufrir un cuadro de peritonitis aguda, el hijo menor de un pastor norteamericano afirma haber estado en el mismísimo cielo durante el transcurso de la operación. Detalla fielmente situaciones y familiares a los que jamás conoció en vida. Incluso, asegura haberse sentado en el regazo de Cristo en persona.

el cielo es realCon tan arriesgado argumento, sólo había dos formas de ejecutar el film, inspirado supuestamente en las vivencias experimentadas por el pequeño Colton Burpo (y relatadas en el libro homónimo escrito por su propio padre); desde la fidelidad al relato de origen o abriendo nuevos horizontes desde una vertiente más escéptica, o al menos más sugerente.
Wallace elige la primera opción. Decisión digna, qué duda cabe, pero muy arriesgada. Un arma de doble filo principalmente visible en los flashbacks. Porque si bien es cierto que logra un tono estable (aunque algo almibarado) en la parte más emocional, las visiones celestiales chirrían por ser demasiado gráficas y explícitas.

el cielo es realNo sólo apuesta por la credibilidad del relato, sino que impone un halo fantástico (al estilo Campo de sueños, con la que se ha comparado oportunamente) de desvergonzada sensiblería. Sigue al pie de la letra el limitado libro de Burpo en vez de profundizar ideas más estimulantes visibles desde la lejanía, como el papel de los padres, fervientes religiosos, en el universo contado por su vástago (de impresionante parecido físico con el verdadero Colton) o las secuelas directas en la iglesia, contrarias al idealismo de ángeles y diversión descrito.

Greg Kinnear vuelve a mostrar su valía interpretativa llevando el peso de la película, de bellísima y panorámica fotografía, bien narrada y cargada de buenas intenciones. Quizá, demasiadas.